Posteado por: Javier | julio 1, 2013

El caso Trayvon Martin: la absurda muerte de un inocente

Este fin de semana Alfredo, alguien siempre muy interesado en los casos penales en EEUU (y ciertamente son más apasionantes que aquellos que tenemos a este lado del Atlántico), me ha consultado acerca de mi opinión sobre el crimen con elementos raciales que está conmocionando Norteamérica desde hace más de un año: la muerte de Trayvon Martin. No sé si tocará el tema en alguna entrada, pero aquí va mi opinión.

Trayvon Martin era un chico negro de 17 años que el 26 de febrero de 2012 resultó muerto de un disparo en el pecho a manos de un latino, hijo de padre judío y madre peruana, llamado George Zimmerman, de 28 años.

 Trayvon Martin

.

Los hechos ocurrieron en la urbanización “Retiro en Twin Lakes”, a las afueras de Orlando (Florida), un lugar cuya mayoría de habitantes son blancos acomodados, en una noche oscura y lluviosa. Trayvon Martin se dirigía a través de allí a la casa de su padre, después de comprar un paquete de gominolas y un té helado, mientras Zimmerman actuaba como vigilante de barrio voluntario, armado con una pistola, en la urbanización perteneciente a la localidad de Sanford.

Las versiones son bastante confusas. Según la investigación de la Policía de Sanford, el servicio de Emergencias de la ciudad recibió a las 7 y nueve minutos de la tarde una llamada en la que Zimmerman alertaba de la presencia de una persona sospechosa en una calle de Twin Lakes. “Últimamente hemos sufrido varios robos en la urbanización y ahora estoy viendo a un desconocido que anda de forma sospechosa”, recogen las grabaciones de las llamadas. “Parece que no se encuentra bien, como si hubiera tomado drogas o algo así”. Además, Zimmerman añade que el desconocido parece deambular sin rumbo fijo bajo la lluvia y sentencia: estos gilipollas siempre acaban escapando.

Dos minutos después, Zimmerman asegura a la operadora que el sospechoso “ha salido corriendo”. El vigilante voluntario comienza entonces a perseguirle, pese a que desde Emergencias le piden que no lo haga. También solicita que la Policía acuda con rapidez y que le llamen en cuánto estén cerca para poder darles la ubicación precisa. Después cuelga el teléfono.

Por su parte, la novia de Trayvon asegura que la llamó por el móvil para decirle que un tipo lo estaba siguiendo. Ella le aconsejó que corriera, pero entonces se produjo un intercambio de palabras entre Trayvon y su perseguidor. “¿Por qué me sigues?”, habría preguntado el adolescente. “¿Qué estás haciendo aquí?”, habría inquirido a su vez Zimmerman. Pudo haber habido un forjeceo y al final se produjo un disparo. Una grabación sonora recogió a uno de ellos pidiendo auxilio. George Zimmerman asegura que es su voz, pero la madre de Trayvon insiste en que es la voz de su hijo.

Cuando la Policía llegó al lugar donde se cortó la comunicación, encontró el cuerpo de Martin con un disparo en el pecho y a Zimmerman con la cara y el cuero cabelludo ensangrentado. El vigilante no negó haber disparado con su Kel-Tec PF-9 de 9 milímetros semi automática, aunque argumentó que había actuado en defensa propia y porque creía que Martin “estaba armado”. Pero resulta que Martin lo único que llevaba eran las gominolas y el té helado.

El caso ha desatado tanta indignación y protestas en EEUU, por el supuesto elemento de “odio racial” agregado al mismo, hasta el punto de que incluso Obama ha aparecido en televisión hablando del mismo.

Para empezar, George Zimmerman NO ES BLANCO. No lo es. No es el caso de un “blanco supremacista” o “racista” que ha matado de un tiro a un negro por motivos racistas. El crimen sería igual de execrable si lo fuera, pero no lo es. Esto es importante pues la prensa más amarilla y tendenciosa (o, también, el demagogo Spike Lee, director de la película hagiográfica sobre el terrorista negro Malcolm X) anda desde entonces vendiendo eso. Claro, cómo iban algunos a vender periódicos si no crean ese morbo del componente racista en el crimen. Pero es que Zimmerman ES LATINO. Miren su foto y juzguen, ¿es “blanco” este sujeto? ¿De verdad que Zimmerman es “blanco”? ¿?¿?¿?:

 George Zimmerman

 .

Ya digo que lo que hizo sería igual de deleznable si hubiera sido blanco, pero parece que, si se le vende como un “blanco racista”, para la opinión pública es como si se le añadiese un “plus” de “maldad” de cara a una posible condena. Porque, y esa es otra, ¿es que acaso un latino no puede ser racista? Pero el caso es que hay que inventarse que es «blanco» para introducir como sea el elemento racista.

Otra, ésta para los teteros del “Tea Party”. Sí, la autopsia reveló que Martin había fumado marihuana. Vale, ¿y? Los defensores de Zimmerman intentan retratar a la víctima como un adolescente de perfil agresivo, con problemas en el instituto y que había sido suspendido tras encontrar restos de marihuana en su mochila. Ello es irrelevante en este caso. No es “la muerte de un negrata drogata y mal estudiante”, sino la de alguien desarmado a manos de un hombre armado y de bastante más edad que él.

EL HECHO ESENCIAL ES QUE ZIMMERMAN DESOBEDECIÓ UNA ORDEN QUE RECIBIÓ DEL SERVICIO DE EMERGENCIAS, QUIENES LE ORDENARON DETENERSE Y ESPERAR A QUE LLEGASEN AL LUGAR (por eso he subrayado ese dato en el relato de los hechos). Si hubiera obedecido, en vez de pretender dárselas de “Capitán América” (o el superhéroe de los comics que se les ocurra) yendo a por un presunto maleante, hoy Martin seguiría con vida.

Algo que también hay que tener en cuenta:

En los hechos parecía haber bastante premeditación por parte de Zimmerman. Desde luego, lo acreditan sus palabras: “estos gilipollas siempre acaban escapando”. Parece que tenía bastantes ganas de dar “su merecido” a alguno de “estos gilipollas” (se supone que los ladronzuelos que de vez en cuando pulularán por esa urbanización para cometer algún robo).

O eso, o, como he dicho, el latino pretendió dárselas de superhéroe delante de sus vecinos “blanquitos”, deteniendo él solito a un supuesto “ladrón” (encima, un negro), sin embargo, Martin se resistió empezó un forcejeo y Zimmerman, nervioso, terminó disparándole, con tan mala fortuna que lo mató en el acto.

Zimmerman dice que actuó en defensa propia, evitando que Martin le arrebatase el arma, y que éste golpeó su cabeza contra el cemento varias veces produciéndole heridas en la cabeza. Sin embargo, la propia grabación de la policía cuando llega a comisaría esposado contradice su versión, pues no presentaba lesiones en ese momento. Aparte, varios testigos afirman que el altercado se produjo únicamente en el césped, siendo Martin el único que pidió ayuda. Más en contra de Zimmerman.

En un principio, el caso y las versiones me parecieron tan confusos que pensé que no sería extraño que Zimmerman fuese absuelto por falta de pruebas o que pudiera acogerse a la ley de Florida “Stand your ground”, que protege de una persecución penal o responsabilidad civil a las personas que reclaman legítima defensa después de un tiroteo o incidente violento. Según esta ley, las personas no tienen la obligación de retirarse de un lugar en donde tienen el derecho de estar y además les permite utilizar la fuerza mortal si creen que están en peligro de muerte o daños graves.

Sin embargo, después de estudiar un poco más otros detalles (son muy importantes las comunicaciones previas de Zimmerman), sobre todo su desobediencia a una orden que recibe por parte de la autoridad, me inclino a pensar que, como mínimo, la muerte de Trayvon Martin fue un homicidio imprudente y, en cualquier caso, innecesario, pues hay varias pruebas que contradicen la versión de que la vida de Zimmerman estuvo en peligro durante el forcejeo.

Esperemos, y Dios quiera, que la verdad sobre los hechos se aclare. Si Zimmerman ha mentido, aunque lo creas, no es la simple muerte de un negro drogadicto y maleante (que está por ver si Martin era eso, y no solamente un joven negro que venía de comprar unas chucherías y un refresco, y que estuvo en el lugar y el momento equivocado). Si Zimmerman ha mentido, es la muerte de un inocente. Y es la posibilidad de que otro Zimmerman de la vida, que vaya de Charles Bronson de este mundo, a ti o a mí nos descerraje un tiro y nos mate, aunque estemos desarmados, alegando que se ha sentido “en peligro de muerte”.


Respuestas

  1. Una excelentísima entrada, Javier. Gracias por esto. El caso es que, como usted bien dice, ha muerto un joven inofensivo ya que no llevaba armas ni nada de eso. Martin NO TENÍA antecedentes penales, por cierto. Es importante subrayar eso también porque no se trata entonces de un «delincuente» fichado por la Justicia.

    En segundo lugar, Martin ya vivía en este complejo residencial. ¿No cree que una persona de seguridad mínimamente inteligente lo sabría? ¿Cómo vas a matar a un residente?

    ¡Ah! Zimmerman por su parte, SÍ tenía antecedentes penales que luego fueron borrados por entrar en un acuerdo con los fiscales y también habia recibido una orden de alejamiento por «malos tratos» a su novia.

    Sí, escribiré algo sobre este tema más adelante, aunque esta semana ya he empezado a dar clases y estoy algo «liado» con los jóvenes franceses.

    Saludos
    PD: Descuide de las teteras…no son serios pero están bien para echarse unas carcajadas ante las barbaridades que dicen.

  2. Hola, Alfredo:

    Desde luego que sí que es patético que se intente defender a Zimmerman creando la imagen del chico muerto como si fuera un “negro drogata” y “conflictivo” o que “fumaba porros”, cuando por lo que parece no era alguien violento. Lamentablemente, algunos adolescentes de vez en cuando se fuman algún porro, pero eso no los convierte en peligrosos criminales ante los que un tío hecho derecho como es Zimmerman vaya automáticamente a temer por su vida, más aún si con lo que van “armados” es con una bolsa de gominolas y un refresco. También se ha dicho que es que Martin llevaba puesta la capucha de una sudadera, y que eso confundió a Zimmerman, pero es que en EEUU muchísimos negros jóvenes van con esa estética sin que eso los convierta en delincuentes.

    Zimmerman, como mínimo, actuó como un negligente.

    Muchas gracias y estaré pendiente de su criterio.

    Un saludo.

  3. Hola Javier:

    Tema porros: De hecho, considero que la juez no debió permitir indagar sobre ese asunto en el juicio, ya que podría crear un perfil nada favoorable para la víctima. De hecho, la juez ha dicho que permitirá acceder a esa información, pero que no será admitida como «prueba» de nada en el juicio.

    Tema capucha: Yo no diría que «muchísimos» jóvenes negros la llevan. Más bien la llevan en zonas urbanas pobres y tampoco todos.

    En todo caso, NO SABEMOS cómo iba vestido porque el testimonio de Zimmerman no es que sea muy…»fiable». Sí sabemos que Zimmerman SALIÓ DEL COCHE y que, ¡oh! más malas notícias, sus «lesiones» no fueron nada graves, según EL MÉDICO:

    http://www.reuters.com/article/2013/07/02/usa-florida-shooting-idUSL2N0F811C20130702

    Heridas «insignificantes».

    Pero aún si estuviera vestido como dicen algunos, ¿entonces estar vestido de cierta forma ya te convierte en blanco de disparos? Esa gente es IGNORANTE de verdad.

  4. La capucha además la llevaría puesta por la sencilla razón de que estaba lloviendo esa noche. No es nada raro que quien lleve una sudadera con capucha se la ponga si empieza a llover y no tiene otra forma de cubrirse. Aún cuando fuera así, por esa regla de tres, habría montones de “ladrones” encapuchados los días de lluvia.

    Pues con el tema de la marihuana (como con otras cosas, aparte de insinuar que era un joven con “problemas en el instituto”, que está por ver, pues eso parece más bien una insinuación para desprestigiar a la víctima en el juicio), lo cierto es que la familia de Zimmerman parece que está intentando crear una imagen estereotipada y negativa del chico: porque, AUNQUE FUERA VERDAD, ¡¡como si acaso estuviera justificado pegarle un tiro a un jovenzuelo porque se fume algún porro, tenga algunos suspensos en el instituto y vaya con la capucha de una sudadera!!

    Es lamentable y muy repugnante, parece como si quisieran propagar la idea de que no pasa nada, “pelillos a la mar”, si se pega un tiro a un joven negro SUPUESTAMENTE de perfil “marginal” (o “pandillero”), SUPUESTAMENTE, pues como digo todo apunta a que no son más que insinuaciones.

    Vaya, pues parece que va ser que no, que al tiarrón de Zimmerman el chaval de 17 años no lo agarró y empezó a golpearle la cabeza salvajemente contra el pavimento, como contó.

  5. […] lectores: Como ya escribió Javier sobre este tema el otro día, cito de su texto los hechos para añadir mis propias […]

  6. […] otras noticas, hace algunas semanas hablé sobre el caso de la muerte de un adolescente negro, Trayvon Martin, a manos de un vigilante de seguridad voluntario, George Zimmerman, en una urbanización en el […]

  7. […] Hace aproximadamente un año publiqué una entrada titulada “El caso Trayvon Martin: la absurda muerte de un inocente”. […]


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